El Ministro de Economía Sergio Massa buscará implementar un mecanismo para el ordenamiento que más le preocupa: la marcha de los precios de los alimentos, que escaló a dos dígitos en el IPC de abril.
En el paquete de medidas económicas que el funcionario esbozo el domingo, con la intención de contener precios, apareció la creación de la Unidad de Análisis del Comercio, que básicamente tiene como objetivo intervenir todos los números de las empresas, para sancionar y cortarles beneficios a las que remarcaron precios al valor dólar blue y le pidieron recursos al Estado. Algo que empezará a verse en los próximos días y que ya inquieta a las firmas de alimentos, sector al que el Gobierno no logra poner en caja.
La idea partió de lo que fue un gesto de fuerte recriminación de Massa a su gabinete, luego del durísimo IPC de 8,4 del viernes último. En ese contexto, les pidió explicaciones, reportes y propuestas, y a partir de eso definió. La Unidad de Análisis del Comercio está integrada por un abanico variopinto de organismos, para cubrir todo el espectro de ámbitos en los que se mueven las empresas del consumo masivo: están allí la Secretaría de Comercio, de Producción y de Agricultura del Ministerio de Economía, más Afip, DGI, Seguridad Social, Aduana, Banco Central, la Superintendencia de Seguros, la Comisión Nacional de Valores y la Unidad de Información Financiera (UIF).
En este esquema deberán quedar expuestas las empresas que fabrican alimentos, bebidas y canasta básica y que en el post corrida cambiaria corrigieron precios al dólar blue, cuando sus importaciones son al dólar oficial. “Les vamos a dar una señal clara a los formadores”, dijo el ministro, que entiende que el esquema de multas seguirá, pero que ex ex post y la situación amerita mover antes de las consecuencias.
Ya hay indicios de empresas grandes que remarcaron al blue y pidieron dólares oficiales para importar, información que circulará el breve. Hasta el momento, Comercio había sancionado a los gigantes Coca Cola y Danone por subir precios en los barrios por encima de los acuerdos de Precios Justos. Pero en la tanda siguiente habrá más firmas que será observadas ya no con multas, sino con medidas más drásticas sobre su actividad.