Agustina Díaz, integrante de la Fundación Ley Micaela, hizo hincapié en la participación de las mujeres en la política y la necesidad de retomar las conquistas.
En este contexto electoral planteó dos líneas de análisis, vinculadas al lugar que las mujeres ocupan en la lista teniendo en cuenta la ley de paridad, lo cual tuvo un fuerte impacto a la hora de garantizar la participación; algo que no se traduce en la conformación de los gabinetes, “sobre todo en los altos cargos ejecutivos, en el ámbito universitario con cinco rectoras a nivel nacional, o las instituciones deportivas”.
En otra variable se observa en el corrimiento de la agenda de cuestiones vinculadas al género o al derecho de igualdad: “Un corrimiento hacia la derecha y un enfrentamiento con las conquistas de los movimientos feministas”. En este sentido, señaló “un retroceso” y “una sobreactuación” respecto a la temática.
Lo cierto es que “las reivindicaciones son fundamentales”, ya que lo expuesto tiene un trasfondo más arduo ligado a los casos de violencia. Además, indicó que los indicadores de gravedad “no mejoraron durante los últimos años”.
Las dos aristas que requieren de una mirada urgente son: un Estado que actúe con la perspectiva de género, y procesos culturales ante la violencia machista, entendiendo que los victimarios son personas sanas que saben lo que hacen y por ende son punibles.
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