Mientras continúan las negociaciones en los distintos despachos del Congreso Nacional se siguen sumando comunicados hacia las y los legisladores nacionales solicitando rechazar el DNU y la Ley Ómnibus.
En esta oportunidad el Foro de Economía y Trabajo, integrado por economistas y especialistas, emitió una misiva solicitando revertir urgentemente la “terapia de choque”, la liberalización de los precios sin control alguno y la perversa devaluación de nuestra moneda que ejecuta el gobierno de Javier Milei, poniendo foco en avanzar a través de un “shock anti-inflacionario” incluyendo la emergencia alimentaria, la recuperación del poder de compra de los salarios, jubilaciones, asignaciones y salario social complementario, así como el desacople de precios internos de los internacionales; además de una renegociación con el FMI a cargo del Congreso de la Nación contemplado la debida investigación sobre su gestión, beneficiarios y destino en el período 2015-2019
Documento:
Espacio Economía y Trabajo le pide a las y los legisladores nacionales:
INEXCUSABLE: RECHAZAR EL DNU 70/23 y el PROYECTO OMNIBUS
OBLIGATORIO: ARREGLAR LA DEUDA EXTERNA E INTERNA
Nos dirigimos a las y los legisladores nacionales, manifestando, junto a las y los trabajadores, nuestro firme compromiso con el Paro y Movilización del 24/1, pues es vital:
- Rechazar en todos sus términos, aún con las modificaciones publicadas el 22 de enero, el DNU 70/23 y el proyecto de “Ley Ómnibus” (mensaje 7/23) hoy en debate en el Congreso de la Nación, enviados por el P.E. con el argumento de dar respuesta a una crisis –esencialmente financiera para el sector público – anulando derechos y garantías de la Constitución Nacional, como los laborales consagrados por su art.14 Bis;
- revertir la política de liberalización de los precios sin control alguno y de devaluación aviesamente potenciada, de nuestra moneda dispuestos por el Gobierno de Javier Milei en una estrategia de “todo o nada”.
De no ser así , se aceleraría la mega-devaluación o reducción de ingresos alimentarios de la inmensa mayoría de las familias, de los recursos de las provincias y la licuación de los ahorros de los argentinos. Se liquidarían a precio vil activos y empresas públicas estratégicas que nos pertenecen a todos. Quedarían expuestos a extranjerización territorios y con ellos otros recursos naturales estratégicos. Entonces desaparecerán miles de pequeñas o medianas empresas y sus puestos de trabajo. Predominará la usura. Las desregulaciones facilitaran la evasión fiscal, el lavado de dinero y el narcotráfico. Crecerá, la indigencia y la inseguridad.
El “plan” que así se consolidaría, por un lado, responde en exceso a las imposiciones del Fondo Monetario. Ello agravará la crisis originada en el pago de la fabulosa deuda contraída con comisión de fraude y sin aprobación del Congreso de la Nación, por el Gobierno Macrista y gestionada por el mismo – entonces y ahora– Ministro de Economía. Del círculo vicioso de esa deuda, que no benefició al pueblo argentino, no salió ni el Gobierno ni el Congreso del período 2019-23. Nunca se investigó ni se identificó a las personas y empresas beneficiadas, aún a pesar de su denuncia cajoneada en el Poder Judicial.
Por otro, es funcional a las corporaciones empresarias que con mercados cautivos impulsan el alza bestial del costo de vida y la devaluación de nuestra moneda para comprar, por la mitad, lo que vale el doble. Es decir, a la voracidad de los grandes formadores de precios con gravísima responsabilidad en la generación de la crisis que atravesamos.
Aprobar estas normas haría, no ya deficitario, sino imposible un adecuado cumplimiento de las obligaciones del Estado en materia de Seguridad Social – Salud, Jubilaciones, Asignaciones Sociales – Obra Pública, Educación, Inversión, Ciencia, Ambiente, Defensa Nacional. Implica aceptar como sostiene el Presidente Milei que “el Estado es el problema mismo” y no las malas decisiones de gobierno.
Urge pues, tanto rechazar el DNU y la Ley “Ómnibus”, como adoptar medidas imprescindibles para superar esta encrucijada que necesitan la acción legislativa del Congreso Nacional (ver anexo), que tiene la obligación de arreglar la deuda externa e interna de la Nación.
Y revertir la destructiva “terapia de choque” del Gobierno, con un “shock antinflacionario”, basado en:
- La declaración de la Emergencia Alimentaria, sin dudas de real urgencia y no incluída ni en el DNU ni en el Proyecto “Omnibus”. Incluyendo un programa de precios asequibles que garantice la alimentación y consumos básicos de toda la población.
- La inmediata recuperación del poder de compra de los salarios, jubilaciones, salario social complementario, y asignaciones familiares.
- Medidas cambiarias que complementen relaciones con el exterior con el fortalecimiento del mercado interno y la moneda nacional.
- Desacoplar los precios internos de los alimentos de los internacionales de exportación, vía fijación de cupos de exportación y reestructuración de los derechos de exportación (retenciones)
- Equilibrio fiscal apoyado en impuestos relacionados con la capacidad contributiva
- Aplicación con todo rigor de la legislación vigente para coadyuvar en el quiebre de la inercia inflacionaria (Por ejemplo, Leyes 27442,2240,26991,27545)
Asimismo, un nuevo horizonte de trabajo, producción, inclusión, y desarrollo económico social, exige:
- Una renegociación integral por el Congreso de la Nación (Art. 75 de la Constitución Nacional) de la deuda con el FMI, contemplando la debida investigación sobre su gestión, beneficiarios y destino en el período 2015-2019. Deberá asimismo asumir su responsabilidad en cuanto a la deuda interna.
- Una nueva Ley de Coparticipación Federal.
- Una reforma y simplificación tributaria.
- Impulso al ahorro nacional en un sistema financiero no especulativo, con una banca pública consolidada.
- Un programa industrializador con justa redistribución del ingreso
En pos de estos objetivos creemos necesaria una alianza para promover la unidad nacional asentada en acuerdos básicos que integren a las mayorías del trabajo y la producción nacionales.
Confluir en el paro y movilización del 24 de enero, es una obligación con la Nación y con nosotros mismos. En defensa de nuestra soberanía, el patrimonio nacional, los recursos naturales, de las provincias y de las familias, de todas y todos los trabajadores activos, jubilados y pensionados, de los sectores productivos del mercado interno.
LA PATRIA NO SE VENDE
Buenos Aires, 22 de enero de 2024
FORO ECONOMÍA Y TRABAJO
(El Foro Economía y Trabajo es conformado por economistas y especialistas propuestos por las organizaciones sindicales de nuestro país, abierto a todas las instituciones que integran el Movimiento Sindical Argentino, así como a los aportes de organizaciones que agremian a las PyMEs, cooperativas y a la economía popular.
Los autores del documento son Ricardo Aronskind, Juan Pablo Costa, Norberto Crovetto, Raúl Dellatorre, Marcelo Di Ciano, Marisa Duarte, Roberto Feletti, Cecilia Garriga, Santiago Mancinelli, Jorge Marchini, Felisa Miceli, Horacio Rovelli, Tomás Raffo, José “Pepe” Sbatella y Nahuel Silva. Su coordinador es el dirigente de la Asociación Bancaria Eduardo Berrozpe.)