Se confirmó el fracaso de la Ley Ómnibus y “las fuerzas del cielo” no tardaron en coordinar una nueva fase del plan asegurando que “la actual crisis económica y social que vivimos, requieren respuestas inmediatas y medidas efectivas”.
Los ideólogos del mismo incluyen a nuestro actual presidente de la Nación y su círculo libertario más íntimo, La Cámara de Comercio de Estados Unidos en Argentina, los fondos buitres, el entramado concentrado agroindustrial argentino, y grandes medios de comunicación..
Ante esta premisa, el secretario adjunto para el Hemisferio Occidental del Departamento de Estado de Estados Unidos, Brian Nichol, expresó que “Argentina es un aliado y un socio clave para los Estados Unidos. Este país tiene los recursos humanos y naturales para tener éxito a nivel global”.
Y continuó: “El proceso de reformas por parte del Gobierno de Javier Milei es algo clave para el futuro. Argentina no puede seguir con esta crisis y con una década sin crecimiento económico e hiperinflación. Llegar a un acuerdo con el FMI es beneficioso para los argentinos” (…) “Tratar de reducir la inflación, vivir dentro de los medios económicos de la Nación, eso es algo normal y fue la plataforma de campaña del presidente Milei. Entonces yo creo que tiene el apoyo del público. Pero es un proceso democrático, tiene que pasar por el Congreso y al final de cuentas es una decisión del gobierno y del pueblo de Argentina, no de los Estados Unidos”.
La historia se repite pero de una manera más contundente y vertiginosa, con el desguace que prometen los monopolios; con la pérdida del poder adquisitivo fruto de la fuerte devaluación y la inflación de estos días; a lo cual se suma la medida tomada por el Presidente para castigar a los gobernadores que no apoyaron su Ley Ómnibus, la eliminación de subsidios para el transporte, hecho que va a agredir a las y los argentinos y no a funcionarios.
Mientras tanto, Milei fija posición en conflictos armados internacionales que nada tienen que ver con nuestro Nación en las redes, en conjunto con su ejército de trolls y seguidores agrede, y amenaza de muerte a gobernadores y legisladores que no coinciden con sus planteos.
El inicio de clases está en duda ante las medidas del ejecutivo nacional y se empieza a hablar en diversos ámbitos políticos y empresariales de la viabilidad de este proyecto político. Por eso, parece indispensable que los sectores populares, los más perjudicados, se organicen en defensa propia de inmediato.