¿Por qué defendemos la educación pública?, es la pregunta que Claudia Bracchi como tantos otros nos hacemos frente al desconcierto generado por un cambio de paradigma, una propuesta libertaria que llegó para quebrar las bases de tantos años de lucha y derechos. Una pregunta y mil razones que nos interpelan llegando a una misma conclusión.
Para esta oportunidad, Bracchi habló de la educación en contexto de encierro asegurando que fue la gestión pública la que posibilitó el conocer sobre el tema y a sus protagonistas.
Su visibilización permite poner en valor las políticas públicas, quienes trabajan en aquellos lugares, y la articulación del Estado entendiendo que “las escuelas en contexto de encierro son instituciones dentro de otras instituciones”, donde interviene la Dirección General de Cultura y Educación, el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos, el Organismo de Niñez y Adolescencia, entre otros, donde lo que prima es “el derecho a la educación”.
Como punto a tener en cuenta, mencionó que los hijos de aquellas mujeres que están en contexto de encierro tienen a sus niños hasta los 4 años, y el paso cualitativo “fue que esos niños y niñas ahora van a un jardín fuera de la cárcel”.
“Hay cuestiones y dimensiones que pueden abrir un sinfín de universos”, recalcó, cerrando su columna con dos frases: “En la escuela encontré las alas” y “Todo era impensado antes de la escuela”.
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