El director provincial de Agricultura, Mariano Pinedo, describió cuál es la situación actual del sector agroindustrial, la cual denota un fuerte compromiso por parte del gobernador de la Provincia.
En principio mencionó que el cambio climático favoreció, en parte, a la agricultura al igual que los precios. “La desgracia que sufrió Brasil nos pone en otra situación porque, cuando se pone a comprar, a Argentina la levanta mucho; las inundaciones, generaron un esquema distinto para los mercados nacionales en lo que es la venta de trigo”, reflejó.
Si bien los mercados agropecuarios están más vinculados a la demanda que a las coyunturas políticas -salvo en cuestiones graves como sucede con Ucrania- “el desaguisado absoluto que está llevando el gobierno de Milei, con un pedido de disculpas diario por parte de la Canciller, hace más difícil la previsibilidad de Argentina en el mundo, por cuestiones meramente de capricho”. “Nadie en el mundo hace negocios con alguien que te insulta”, añadió.
A pesar de esto, aseguró que la Provincia está muy concentrada en identificar aquellos espacios en donde el Gobierno nacional retira la presencia del Estado, para fortalecer el desarrollo económico en todos los niveles. El ejemplo es el programa Pro Huerta, como una forma de respuesta “que hace casi en soledad la Provincia”.
Corriéndose de su función específica y coyuntural respecto de la gestión describió que el RIGI (Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones) “es la explicitación más brutal del sueño de todos aquellos que imaginan a Argentina como un terreno de sacrificio. Es una especie de torbellino que entra y sale, y no deja nada a nuestro país”.
Frente a ello, apuntó que es necesario pensar un camino de salida para que el pueblo sepa que hay una alternativa, sino se va a desesperar. Por eso, nos parece que Axel Kicillof está teniendo una civilizada manera de atender la realidad, y relaciones forman parte de la agenda cotidiana, donde el peronismo tiene que replantear cuál es nuestra modalidad con los distintos sectores, porque no puede ser que nuestra relación esté ordenada por tres o cuatro dirigentes; tiene que ser en función de una salida ordenada, ampliada”.
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