El gobierno nacional pasa por uno de sus momentos más complejos, difíciles. El Presidente, que se autodefine como especialista en “crecimiento económico con y sin dinero”, no para de profundizar una depresión económica que especialistas de diversos extractos ideológicos definen como histórica, inédita e imprevisible en su desenlace. Niveles de pobreza cada vez más altos, con aumentos de combustibles, transporte e impuestos constantes, comercios y empresas que cierran sus puertas de manera constante, y quienes pueden mantener abierto sus emprendimientos auguran un futuro trágico.
En términos de la macroeconomía, el falso déficit cero, los lingotes de oro que conforman los últimos resabios de reserva, se escapan vaya a saber a dónde, y el nulo apoyo a nivel internacional que está
obteniendo el gobierno, tanto del FMI, como de países o fondos de inversión hacen más oscuro no sólo el presente sino el futuro del gobierno nacional y de nuestro pueblo. Milei apenas puede mostrar un estancamiento (¿real?) de la inflación, a costa de la escasez de consumo.
Viene La Libertad Avanza de una dura derrota en el Congreso con el rechazo en la Cámara de Diputados al Decreto Presidencial que incrementó en 100.000 millones los fondos reservados para la SIDE, fondos reservados que habían sido derogados Cristina Fernández de Kirchner. Usted vecina, usted vecino se preguntará, ¿No hay plata para jubilaciones, para las Universidades pero sí para gastar en espiar vaya a saber a quién, o para como se sabe para trolls, o pauta publicitaria a los “ensobrados”? como dice, con conocimiento de causa parece, el mismo Presidente de la Nación.
La falta de oposición, como plantea algún axioma político ha hecho que se profundicen
las internas libertarias, con escandalo en el Congreso que incluyeron gritos, y hasta denuncias
de violencia como consecuencia de la visita de Legisladores a detenidos pro crímenes de lesa
humanidad. La burda frontalidad presidencial y sus desvaríos, siguen encontrando en la acción
política de la vicepresidenta Villaruel quizás el opositor más contundente en estos momentos. Resulta llamativo, en este sentido, las coincidencias de oficialistas y opositores en torno a la figura del Juez Lijo.
Para completar este mapa, Mauricio Macri y Javier Milei han tenido en los últimos días idas y vueltas. El líder del PRO, no cesa en sus genuflexiones por cargos en áreas estratégicas del Estado donde suelen dirimirse negocios importantes, lo cual genera sospechas sobre si son pedidas para construir sentido en el proyecto anarco capitalista. Para ello, no dudó en mandar a la parrilla a sus propios legisladores que quedaron como verdaderas marionetas esta semana al ser mandados por Macri a votar algo de lo cual horas después dio marcha atrás, vaya a saber por qué acuerdo con el Presidente de la Nación. ¿Qué será lo que hace a tantos dirigentes seguir bajo el ala de Macri a pesar de tantos desaires, faltas de respeto y escasa popularidad?
Al pasar se recuerdan las palabras del Jefe de Gabinete Guillermo Francos, quien al ser preguntado por la oposición inicial de el ex presidente al DNU de la ampliación de fondos para la SIDE dijo que él sabe de la importancia de los fondos reservados. Ni el escándalo generado en torno a Alberto Fernández ha podido ocultar todo lo detallado.
La Provincia no es una isla.
Mientras Milei pone techo del 2% a las paritarias Axel Kicillof acordó paritarias por agosto y septiembre con los sindicatos estatales, que alcanza a los jubilados del sector. No obstante el cuidado del presupuesto es total, y esto se demuestra en el pedido de devolución de fondos que se hizo esta semana por parte del Ejecutivo provincial al intendente actual y su antecesor, de origen radical, por obras pagas y no realizadas. ¿Seguirá este ejemplo con otros municipios? ¿Con propios y extraños?
El gobernador no para de viajar para cortar cintas y así fue esta semana en Cañuelas (Inaugurando el primer Centro de Desarrollo Infantil en el barrio San Ignacio y un nuevo edificio del Comando Operativo Municipal, conjuntamente con la entrega de 10 móviles adquiridos por el municipio para reforzar la seguridad, y firmando tres convenios para ampliar el presupuesto municipal destinado a becas de Unidades de Desarrollo Infantil, una inversión que permite mejorar la atención alimentaria y fortalecer el aprendizaje en los CDI, jardines maternales y Casas del Niño; ), o en General Paz/Ranchos para entregar 124 viviendas, entregar computadoras de Conectar Igualdad Bonaerense y poner en funcionamiento la nueva sede de la Comisaría de la Mujer y Familia.
La oposición bonaerense, está ocupada en sus internas (UCR, Y LLA) o perdida sin saber que rumbo tomar (PRO). Kicillof, en este contexto, enfrenta puertas adentro una confrontación que pocos se animan a definir, y a presagiarle un final. De una lado defensores del gobernador: ministras y ministros enojados con La Cámpora y sus métodos, muchos de ellos hasta hace poco, fervientes defensores o integrantes de “la orga”; ex cristinistas paladar negro que ahora reniegan “del dedo” pero lo usan en sus distritos, en sus sindicatos u organizaciones sociales; movimientos sociales que no han sido un ejemplo precisamente de gestión, pero ya integran las filas del ejecutivo provincial; la militancia activa, que lo sueña más de lo que lo nombra, quizás con mucha más inteligencia que la dirigencia actual; y
bonaerenses que ven un estado que intenta fuertemente ser cada día más eficiente, cercano y
hasta honrado.
Del otro lado, “La Cámpora”, quizás la organización política más grande e influyente de los últimos años, pero con una clara asimetría para construir sentido en lo que se llama “lo nacional y popular”, sino más bien generando rechazos amplios, a fuerza de estigmatizaciones y acciones(que la gran mayoría replica) y que hoy pareciera intentar esmerilar al gobernador en su estrategia presidencial, ¿Para negociar mejor?¿Acaso para quedarse con la Provincia?. Nadie sabe o puede explicitar las diferencias de proyecto político o en el método de construcción política entre “ambos bandos”. Pareciera ser que todo esta
planteado en obtener la mayor musculatura política para disputar cargos y lugares en las listas
de cara al futuro.
¿Y Cristina?.Se preguntará el lector o lectora, ya que nadie puede discutir su (¿parcial?) liderazgo e influencia. Esta semana se bajó al barro, debatió por redes (su método de definición y vinculación política más usado en los últimos años, al menos con la mayoría de los mortales). Quizás un error no forzado. Se cruzó con dirigentes como Jose Mayans, o Guillermo Moreno, por un supuesto juicio político a Milei, o por la mirada con respecto a Victoria Villaruel. Y marcó la cancha como siempre. Una de cal, una de arena, una de barro. ¿Planteos políticos o ideológicos profundos de fondo? ¿Posicionamientos para guardar cuotas de poder? ¿Resguardo de acuerdos pasados o futuros?
Casi todo, muy lejos de las preocupaciones de nuestra ciudadanía.