Las señales del poder económico y mediático parecieran inducirnos a estar viviendo tiempos de cambios culturales y una primavera económica que nos llevaría a dar por sentado que el gobierno de Javier Milei tendría un triunfo asegurado en las próximas elecciones y ocho años mínimo de gestión.(No puedo dejar de pensar, mientras escribo, en los augurios triunfalistas o exitistas en torno a Mauricio Macri y el PRO, allí por los años 2016 y 2017.)
Producto de este supuesto estado de las cosas, son las constantes bravuconadas del máximo mandatario nacional y el ejército de trolls (empleados estatales)con respecto a los cambios a llevar adelante en medio de una “batalla cultural” contra zurdos, woks, kukas, peronistas y toda o todo aquél que ose criticar o si quiera opinar en contra. La alarmante seguidilla de Javier Milei esta semana, no sólo apoyando las gestualidades nazis de Elon Musk, sino amenazando con un contundente “Zurdos tiemblen, los vamos a ir a buscar” ; y su posterior discurso en Davos con palabras tan estigmatizantes como cargadas de odio y falsedad sobre el colectivo LGTB+, los migrantes y otros grupos vulnerables; como las mínimas apreciaciones económicas,también engañosas; hablan de lo envalentonado que se encuentra el espacio libertario por las palmaditas del poder concentrado y algunos mandatarios internacionales, a los cuales por ahora les sirve tener a nuestro Presidente como frontman de un sistema de capital concentrado que lo usa como muñeco puchinball. Con esto no desconocemos capacidad alguna del máximo exponente libertario nacional, para coronar su sueño de rock star y de personalidad mundial. Bueno sería que entre esos anhelos figure el de liderar una Nación pujante con un pueblo feliz. El poder de los maltratos infantiles y la Tilinguería nunca deben de menospreciarse, traen sus consecuencias.
Frente al relato vertido por funcionarios y militantes virtuales libertarios, o por periodistas buena parte del periodismo, creemos que lo importante es informar con datos duros y reales lo que sucede, como para dar cuenta en primer lugar de una, pareciera, doble realidad.Nada de lo que dijo Milei en Davos tiene constatación empírica como gusta decir. Hete aquí algunos datos esclarecedores:
El 80 % de los casos de abuso infantil son intrafamiliares, y más del 99 por ciento de las familias con hijos son heterosexuales.
Según un estudio de la Universidad de California en Davis sobre 352 niños ingresados en urgencias de un hospital infantil de Denver, Estados Unidos, por abusos sexuales en un año, menos del 1% de los casos el autor de los abusos era un adulto LGTB+.(No podemos generalizar sobre casos puntuales o excepcionales.¿ Si existe un caso de abuso por parte de padres homosexuales, deberíamos decir lo mismo de las parejas hetero con las estadísticas esbozadas en el párrafo anterior?)
En la Argentina, según un informe elaborado por Unicef y el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos, entre octubre de 2020 y septiembre de 2021, se registaron 3.219 niñas, niños y adolescentes víctimas de violencia sexual. Sus agresores fueron un 56,5% familiares y los abusos se dieron en un 36,2% en el hogar.
Según UNICEF, las estadísticas indican que la mayoría de los abusadores son varones heterosexuales adaptados socialmente.
Según la Asociación Estadounidense de Psicología, “los hombres homosexuales no tienen una mayor tendencia a abusar sexualmente de los niños que los hombres heterosexuales”.
Según el Observatorio de las Violencias de género, en 2024 hubo 267 femicidios en nuestro país.Sólo el 1% de los casos fue un desconocido el asesino. (Recordemos que el femicidio es la muerte violenta por razones de género, ya sea en el espacio público, privado y está asociado a la discriminación, la misoginia y la violencia de género).
No obstante, y para no caer en extremismos o absolutismos, viene bien recordar las palabras del Papa Francisco sobre la “ideología de nuestro tiempo, que borra las diferencias y hace que todo sea igual; borrar la diferencia es borrar la humanidad. El hombre y la mujer, en cambio, se mantienen en fecunda tensión”dijo el Santo Padre.
Ahora bien, cabe preguntarse ¿Por qué Javier Milei en un Foro económico como Davos llevó adelante un discurso bien alejado de la economía?¿Intenta quedar bien con Donald Trump, las ultraderechas del mundo y los grandes poderes concentrados?¿Carece de datos positivos de su gestión o mucho peor, de una realidad que le permita hablar de la economía argentina libertaria?.
La baja inflación, el triunfo de las jubilaciones y los salarios frente a los aumentos, y el déficit fiscal cero, ejes del relato oficial, no condicen con los datos del INDEC y diversas consultoras sobre lo sucedido en la economía local durante el 2024 (*):
Los salarios de los trabajadores registrados cayeron 11%.
El poder adquisitivo del salario mínimo cayó un 30% .
La tasa de desempleo aumentó 1,2 puntos porcentuales.
Las jubilaciones tuvieron una caída del 17% en la asignación de partidas y un descenso del 25.7 %. Paralelamente las prestaciones de PAMI se recortaron 14% en el marco de la mayor restricción en el acceso a medicamentos.
Cerraron 11.931 empresas y hay 215.981 trabajadores formales menos con trabajo (se estima que en 2025 cierren 25.000 empresas, lo que podría dejar unas 300.000 personas sin trabajo)
La actividad en la construcción cayó un 19,5%, la industria un 12,4% y el Comercio 10,8%.
Telecomunicaciones: Telecom (Flow, internet,etc) aumentó un 225,9%, Personal Móvil un 99%, Claro aumentó más del 130% y Telefónica/ Movistar, 220%.
En Barrios populares el 76,5% de las familias se vieron obligadas a reducir sus porciones o suprimir comidas.
Los productos de almacén subieron 147%, los cortes de carne 71.9% y las frutas y verduras 124,9%.(Todo esto promedio, lo cual significa que algunos productos subieron mucho más y otros menos).
La baja en el consumo de carnes fue del 12,4%, la leche en polvo 29,7%, quesos -7,1%, yogures -12,7% y postres lácteos 51%.
Las transferencias a universidades disminuyeron 41%,
La Tarjeta Alimentar y el programa Potenciar Trabajo sufrieron recortes de más del 35%.
Tuvimos un superávit fiscal de $10.3 billones pero no pagamos deuda por $10,4 billones de pesos. En este sentido la narrativa falsa del déficit cero se basó en la caída del 35,7% en las jubilaciones (que representaron el 34,8% del ajuste total); en la merma en subsidios del 45,8%; en salario un 19,6%), el recorte de las transferencias a las provincias del 76,3%; y en baja de la obra pública un 86,8%.
Tanto gusta dar ejemplos domésticos a los economistas y gran parte del periodismo, que podríamos comparar todo esto con un padre o madre de familia con tres hijos, que se enorgullece de llegar a fin de mes, a pesar de haber decidido renunciar a su trabajo. Lo logra dejando de abonar algunas deudas contraídas, no pagando algunos servicios, pasando a tener solamente almuerzo entre sus comidas, dejando de llevar a la escuela a dos de sus primogénitos, uno de ellos porque lo hará trabajar. Con la tarjeta de crédito empieza a “pedalear” algunos gastos y decide dejar todo gasto destinado a espacios de recreación, deporte u ocio para ningún integrante de la familia.Cuesta creer que en breve esa familia no vea “estallar su economía”.
Punto aparte para la clase dirigencial de nuestro país.Y en esto englobamos a la dirigencia política, sindical, empresaria y eclesiástica. Escasos y tibios fueron los planteos frente a los constantes y cada vez más preocupantes discursos de odio, como así también los planteos acerca de la economía libertaria y el presente de la gran mayoría de las y los trabajadores de nuestro país.
Esto habla del triste estado de las cosas. Imaginen ustedes si algún dirigente peronista, kirchnerista o de la izquierda hubiera tenido estos ataques de desmesura, desprecio y rabia. O bien, si se tomaran las medidas económicas que se están llevando adelante.Ríos de tinta, horas de radio, streaming y tv hubieran inundado nuestras vidas.Pero en este caso, no. Doble vara.
No obstante muchos le auguran a Javier Milei una doble vida.Los propios por convencimiento, aunque mentiroso e irreal sea. Sus adversarios políticos, por temor, especulación, desconocimiento o ignorancia.
Nuestro Pueblo, mientras tanto, en el subsuelo de la Patria,pareciera estár pariendo, con dolor, una nueva vida, una nueva esperanza.
*Datos según INDEC, CEPA CICCRA, Instituto para el Desarrollo Agroindustrial Argentino y el ISEPCi.