En un contexto económico adverso para el consumo cultural, las librerías independientes de La Plata, City Bell, Villa Elisa, Gonnet, Berisso y Ensenada se organizaron para visibilizar una situación que consideran injusta, como lo es la exclusión del sistema de descuentos de Cuenta DNI, herramienta del Banco Provincia que supo ser clave para incentivar la compra de libros, pero que hoy beneficia únicamente a las grandes cadenas.
El reclamo fue expresado en un comunicado firmado por más de quince librerías, entre ellas Mascaró, cuyo local se encuentra sobre Diagonal 73. “Durante meses sostuvimos sin reclamar, entendiendo la situación general de la Provincia. Pero cuando supimos que las promociones volvían y eran sólo para Jenny, El Ateneo y otras grandes cadenas, decidimos hablar”, cuenta Luana Barletta, librera y una de las impulsoras del texto.
Las promociones con Cuenta DNI, que incluían importantes reintegros para el público lector, comenzaron a achicarse progresivamente en los últimos años; primero dejaron de ser exclusivas para librerías, luego pasaron a compartirse con otros rubros como almacenes y dietéticas, y finalmente desaparecieron. “Lo entendimos como parte de la crisis, pero cuando supimos que el Banco había activado descuentos para las grandes cadenas, nos pareció inaceptable”, indicó.
La mayoría de las librerías independientes trabajan con editoriales pequeñas, sostienen catálogos cuidados, planifican cada actividad y apuestan a una construcción cultural comunitaria. “No somos sólo un comercio, y esa es una diferencia fundamental. No se trata simplemente de vender libros, sino de construir espacios de encuentro, pensar qué títulos llevar a una feria, qué contenidos ofrecer, qué valores defender”, señaló.
La sorpresa fue mayor cuando, tras expresar su malestar, desde el Banco les respondieron que podían acceder al mismo descuento que las grandes cadenas, pero financiándolo con recursos propios. “Es una locura”, disparó Barletta, porque “pasamos de pedir que el banco nos apoye, a que pretendan que lo financiemos nosotras. Eso va en contra de la Ley de Defensa de la Actividad Librera”.
A raíz del comunicado, las librerías fueron convocadas a una reunión con el Instituto Cultural de la Provincia y la Secretaría de Cultura de La Plata. Allí se reconoció el reclamo y se comprometieron a interceder ante el Banco Provincia.
Quienes responden a la iniciativa aclararon que no buscan privilegios ni subsidios, sino políticas públicas que reconozcan su aporte a la cultura.