El concejal de Berisso, Daniel Del Curto, rompió el silencio y explicó en detalle las razones de su alejamiento de La Libertad Avanza (LLA), espacio por el que fue electo. En entrevista con Cueste lo que Cueste, arremetió contra el oficialismo nacional a quienes acusó de prácticas corruptas, oportunismo político y abandono de los principios que habían prometido representar.
“Yo me fui por convicciones, no podía seguir siendo parte de algo con lo que no estoy de acuerdo. Y cuando vi lo que pasaba adentro, decidí dar un paso al costado”, aseguró.
“Se vendían candidaturas como si fueran cargos en una empresa”, fue la frase con la que acusó a la conducción de LLA, corriéndose de ese lugar por completo, ya que “eso no es política, eso es un negocio privado con la voluntad de la gente”.
El concejal aclaró que a él también lo quisieron involucrar en esas maniobras, pero que se negó: “Me ofrecieron arreglos, me hablaron de plata, yo les dije que no. Nunca pagué por un cargo ni lo voy a hacer. Si yo hubiese aceptado, hoy estaría cómodo, pero con las manos sucias; por eso, preferí irme y poder mirarle la cara a mis vecinos”.
En ese sentido, señaló que lo que ocurre en Berisso es parte de un patrón más amplio dentro del armado libertario, porque “lo mismo que pasó acá pasó en varios distritos; hubo gente que puso plata para ser candidata, y después se sienta en una banca pensando en recuperar la inversión. Eso es corrupción, lisa y llanamente”.
Más allá de lo local, Del Curto sancionó lo que sucede en el ámbito nacional: “Milei gobierna con los mismos que decía que iba a combatir, con lo peor de la casta. Se llenaron la boca hablando de transparencia y de luchar contra los privilegios, y hoy están entregados a los negocios de siempre”.
“La gente está sufriendo, cada vez hay más familias que no llegan a fin de mes, jubilados que no pueden comprar los remedios, pibes que dejan de estudiar porque no les alcanza. Y mientras tanto, desde arriba se pelean por cargos y negocios; es una estafa a quienes creyeron en ese proyecto de cambio”, asentó.
“No representaban a los vecinos”
Volviendo a la ciudad de Berisso el concejal se desmarcó de sus ex compañeros al decir que “no representan a la gente que los votó, sino a los intereses personales. Están más preocupados por sus propios beneficios que por los problemas reales de Berisso; no puedo avalar eso”.
Si bien reconoció que no es fácil dar un paso al costado cuando uno ya está adentro privilegió su costado moral “para transformar la realidad, no para llenarse los bolsillos”, entendiendo que si se quedaba “terminaba siendo cómplice”.
Tras su salida, trabajó en la construcción de Unión y Libertad, un nuevo espacio que buscará posicionarse como alternativa en la ciudad. “Queremos ser una oposición seria, de centro, democrática y transparente. No venimos a ser funcionales ni al oficialismo ni a la derecha salvaje, venimos a recuperar la ética y el sentido social de la política”, explicó, y aclaró que nada tiene que ver con el kirchnerismo con el que en alguna oportunidad lo quisieron vincular por votar proyectos afines al ejecutivo berissense.
De cara a lo que viene, adelantó que el eje estará puesto en escuchar a los vecinos: “Los berissenses quieren representantes que estén cerca, que recorran los barrios, que conozcan los problemas. Eso es lo que nos proponemos hacer”.
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