En las últimas semanas, vecinos de la zona de 18 y 154, en las inmediaciones del Fortín Gaucho y cerca del corralón municipal, denunciaron la formación de un basural a cielo abierto que estaría generando preocupación por su impacto ambiental y sanitario en el barrio.
Según los testimonios recogidos en el lugar, el predio estaría siendo utilizado para descargar residuos provenientes de camiones municipales. La acumulación de basura se incrementó con los días de calor y las recientes lluvias, situación que agrava el riesgo de contaminación y la posible proliferación de roedores.
Sumado a ello, la zona presenta un problema estructural de inundaciones, lo que podría dispersar residuos y líquidos hacia las viviendas cercanas en caso de continuar con el mal tiempo.
Vecinos señalaron que tiempo atrás se había instalado un punto verde para la separación de reciclables, pero fue retirado debido al uso inadecuado y la acumulación indiscriminada de desechos. Sostienen que, pese a los reclamos, no recibieron respuesta concreta sobre la remoción del basural ni sobre un plan de limpieza sostenido.
La problemática de los basurales a cielo abierto en Berisso no es nueva y ha tenido antecedentes tanto en zonas urbanas como en áreas rurales.
Mientras se reclama la intervención urgente del municipio, también se reconoce la necesidad de reforzar la responsabilidad comunitaria en la disposición adecuada de los residuos.
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