El intendente de Carlos Casares, Daniel Stadnik, confirmó que nueve jefes comunales de la región firmaron un petitorio dirigido al ministro de Economía, Luis Caputo, para exigir la aplicación de la ley de emergencia agropecuaria, la reactivación de obras hidráulicas y el envío de recursos materiales ante la crítica situación por las inundaciones que afectan al centro oeste bonaerense.
Los intendentes de Carlos Casares, 9 de Julio, Pehuajó, Bragado, Bolívar, 25 de Mayo y otros distritos de la región A3 de la Cuenca del Salado reclamaron la intervención urgente del Gobierno nacional frente al impacto de las lluvias que, desde febrero, mantienen vastas zonas rurales anegadas y con graves pérdidas productivas.
“Estamos presentando un petitorio con cinco puntos principales; la aplicación de la Ley 26.509 de emergencia y desastre agropecuario, la asignación de partidas no reintegrables, el reinicio de las obras del Río Salado, la provisión de maquinaria y materiales, y el uso del fideicomiso de infraestructura hídrica”, explicó Stadnik.
El jefe comunal detalló que la solicitud busca activar herramientas ya existentes: “Ese fideicomiso se financia con un porcentaje de cada litro de combustible y debería destinarse a obras hidráulicas y viales. Esos fondos están, pero no se están utilizando para lo que fueron creados”.
Además, dejó en claro que hasta el momento “la ayuda del Gobierno nacional es cero”, y que la única asistencia recibida proviene del Ejecutivo bonaerense. “Desde febrero estamos con este flagelo. Celebro que la ministra Bullrich anuncie la llegada de un centro de operaciones a 9 de Julio, pero hasta ahora no recibimos absolutamente nada. Si viene ayuda, bienvenida sea”, sostuvo.
Sobre el impacto local, el intendente explicó que el distrito sufre una situación estructural: “Carlos Casares está en una cuenca arreica, prácticamente plana, donde el agua no tiene salida natural. Acá no hay ríos, el balance hídrico es vertical: llueve, se acumula y sólo se evacúa por evaporación. Cayó el doble de lo habitual, más de 1.900 milímetros en un año”.
En ese contexto, consideró que la prioridad es reconstruir los caminos rurales; de todas maneras, aseguró que la comuna sigue trabajando con seis frentes de obra activos y diálogo permanente con los productores: “Hay pérdidas importantes, pero seguimos sosteniendo la producción. Lo que necesitamos ahora es acompañamiento y decisiones concretas del Gobierno nacional”.
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