El senador provincial de la UCR, Marcelo Daletto, analizó el avance del paquete fiscal que se discute en la Legislatura bonaerense y destacó como un hecho “importante” que la Provincia vuelva a contar con una ley de presupuesto después de dos años sin esa herramienta básica.
En diálogo con FM TresCiudades, el legislador sostuvo que la sesión (aún en cuarto intermedio) dejó “una primera buena noticia”, que fue el acuerdo para sancionar el Presupuesto y la Ley Impositiva.
A su vez, remarcó que pese a que tanto el Gobierno nacional como el bonaerense están encabezados por dirigentes que no provienen de la economía, ambos iniciaron sus gestiones sin presupuesto aprobado. “Es una paradoja; nunca nos gobernaron economistas y, sin embargo, gobernaron sin la regla básica de todo economista”, señaló.
De cara a la discusión por el endeudamiento, que podría tratarse en las próximas horas, el senador evitó anticipar un escenario. “Solo sé que no sé nada”, ironizó, y explicó que el principal foco de tensión está puesto en el Fondo de Municipios, una herramienta clave para intendencias con dificultades para afrontar sueldos y aguinaldos. “Ahí está la traba real”, admitió.
Respecto al rol del Legislativo, fue categórico al rechazar la idea de que los tiempos dificultan el análisis del presupuesto: “Sobra tiempo para estudiarlo, porque se estudia todos los días del año”. En esa línea cuestionó que el Ejecutivo provincial publique información con retraso, a diferencia de la Nación: “En provincia, cuando se presentó el presupuesto, solo teníamos datos hasta el 31 de marzo; Nación informa todos los meses”.
Daletto también repasó la estructura del gasto y la necesidad de preservar ciertos equilibrios para sostener la obra pública, e idicó que si el peso de salarios, jubilaciones y transferencias trepa demasiado “no hay margen” para inversiones esenciales como la reparación de rutas. En ese marco defendió metas como mantener el gasto salarial por debajo del 40% y recuperar niveles históricos de inversión: “Nuestra provincia fue pobre en obra pública en los últimos años”.
Entre las críticas más duras apuntó al déficit del Instituto de Previsión Social, al que describió como “una bomba atómica” que viene advirtiéndose hace décadas mediante informes actuariales. Según él, el rojo del organismo ya supera al déficit total de la Provincia: “En el océano del gasto público, el IPS es el Titanic que va directo al témpano y el gobernador sigue tocando el piano”.
Pese a los cuestionamientos, el senador destacó que Kicillof adoptó medidas de austeridad que evitaron un cuadro más crítico: “Si no hubiera tomado decisiones, hoy estaríamos pagando en patacones”. Además, valoró que la ley impositiva incluya una baja en automotores y una actualización acotada del inmobiliario: “Es una ley fiscal no agresiva, en una provincia a la que no le sobra plata”.
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