Tras el fallo que dictó la suspensión del juicio a Gabriel Ángel Ramallo Serrano en la causa por hurto, su hija, Daiana Ramallo, dialogó con el programa Cueste lo que Cueste y denunció una maniobra de desalojo ilegal sobre el terreno que la familia ocupa en la Playa Palo Blanco.
Acusó directamente a funcionarios del Municipio de Berisso, incluido el intendente Fabián Cagliardi, de impulsar un operativo armado para apropiarse del predio.
“El allanamiento empieza con la denuncia que hace Federico Ruiz contra mi papá. Lo acusa de haberse robado unas ruedas, de quedarse con un tráiler sanitario, de amenazar a trabajadores de salud, guardavidas; una lista de cosas espantosas”, relató Daiana. Según explicó, durante el procedimiento no se encontraron las pruebas que motivaron la denuncia, ya que “no había ni ruedas robadas ni tráiler escondido; lo único que encontraron fueron unas armas viejas, heredadas de mi abuelo. Estaban registradas, no tenían problemas legales”.
Durante los ocho días que Gabriel Ramallo estuvo detenido, la familia sostuvo que comenzaron los trabajos de demolición de la vivienda y el avance sobre el terreno con la presencia del jefe comunal, Fabián Cagliardi. “A las seis de la mañana entraron con máquinas, camiones, rompieron todo. Él estaba ahí, dando órdenes”, denunció Daiana.
Por lo sucedido, consideró que su padre fue víctima de una operación para sacarlo de un lugar que siempre cuidó. “Jamás se hizo algo en la playa. El que más hizo ahí fue mi papá que plantó árboles, pidió que se hiciera una escollera, preservó la costa. Y que ahora le hagan semejante cama, de encerrarlo, para apoderarse de nuestras tierras, no tiene ni pie ni cabeza”, sostuvo.
También aseguró que cuentan con la documentación correspondiente: “Hay escrituras, por supuesto, pero ellos dijeron que esto es municipal y se metieron con cizaña. ¿Por qué lo quisieron borrar del mapa?”, argumentó, añadiendo que su abuela compró el terreno y que la familia vive allí desde hace generaciones.
Daiana también apuntó contra los funcionarios Sergio Gómez y Gabriel Marote. Sobre este último recordó una frase que, según ella, el concejal le dijo a su padre: “Vos no tenés ni para empezar”. Además, sostuvo que Marote luego reconoció en el Concejo Deliberante que las tierras estaban en manos de un síndico, y que la Municipalidad se encontraba negociándolas. “Ni ellos saben de quién es el terreno, pero igual avanzan, porque tienen poder”, señaló.
Durante la entrevista también reveló presuntas presiones a testigos. Aseguró que un guardavidas fue amenazado para no declarar a favor de su padre. “Le dijeron: ‘fijate que si salís de testigo, vos tenés un trabajo’”, afirmó. También cuestionó el rol del testigo Eduardo Sein, trabajador municipal, y dijo que “no le extrañaría que esté mintiendo”.
Por otro lado, desmintió versiones difundidas en medios locales que indicaban que su padre cobraba entradas para ingresar a la playa. “¿Por qué haría eso, si tenía un kiosco dentro de la playa?”, se preguntó.
Daiana también expresó el impacto emocional y material que vivió la familia durante todo el proceso: “Como hija puedo decir el daño económico, psicológico y familiar que nos hicieron; nos arruinaron la vida con algo que fue armado”. Y criticó la actitud de la concejala Aldana Iovanovich durante una sesión del Concejo Deliberante, donde se expuso el caso. porque “Aldana quiso hacer callar a mi mamá, porque claramente es una secuaz de Cagliardi”.
Por último, apuntó contra el tratamiento mediático del caso, al decir que “apenas pasó esto, enseguida subieron la nota. ¿Quién les pasó el video? No creo que hayan entrado a una propiedad privada a filmar. Se lo dieron”, sostuvo. Y concluyó: “Pensaron que mi papá era un viejo solo, que nadie lo iba a defender, que no iba a tener con qué pagar un abogado. Pero se equivocaron. No está solo, y esta lucha recién empieza”.
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